Muchas veces caemos en el error de creer que los preliminares son cosa de chicas. O bueno, mejor dicho: que solo nos gustan a nosotras.
Pues nada más lejos de la realidad. A ellos también les gusta eso de «calentar motores«. La verdad es que los preliminares, juegos, caricias previas… son un momento de gran complicidad en la pareja, que une más y hace más íntimo el acto sexual.
Una buena idea para empezar es acariciar el cuerpo de tu pareja muy despacio, disfrutando los dos de las sensaciones que produce el roce de la piel del otro. Tomarte tu tiempo, ir despacio y sin prisas, hará que suba el termómetro de la temperatura sexual. Las caricias acercándote a la zona íntima de tu pareja, rozándola pero sin llegar a tocarla, harán que la tensión entre las sábanas suba hasta casi explotar.
Además, siempre puedes introducir algún juego erótico: vendar los ojos de tu pareja, por ejemplo, y rozar diferentes partes de su cuerpo, jugando con la sorpresa de que nunca sepa dónde le vas a besar y a acariciar.
Hay mil ideas que puedes poner en práctica. No te preocupes… te las iremos contando todas.
Foto de flickr
Deja una respuesta