¿Cómo puedes olvidar a tu ex… si solo recuerdas lo que es hermoso? Después de terminar una relación, es fácil olvidar por qué terminamos, por lo que podría pensar que nunca aprenderá a olvidar a su ex. La distancia suele jugar en nuestra contra: con el tiempo, es normal que empecemos a recordar solo las cosas positivas, bonitas, tiernas y divertidas de nuestro ex y es muy fácil dejar de lado por completo las razones por las que decidimos romper. Haz una lista de las razones por las que ya no quieres estar con esa persona y léela tantas veces como necesites para sentirte más seguro en tu decisión.
Ten cuidado de no idealizar tu relación: para saber cómo olvidar a tu ex, necesitas mirar objetivamente los aspectos positivos y negativos de tu relación. Cada vez que te sorprendas recordando lo maravilloso que era tu ex, trata de recordar todas las cosas que no te gustaron. Por ejemplo, lo incómodo que fue discutir sin motivo, la vez que ella decidió no decirte la verdad, o lo mal o infeliz que te sentiste en esa relación. Para superar a alguien, es importante recordar todo: lo bueno, lo malo y lo feo.
¿Idealizas a tu ex?
¿Has idealizado a tu ex? Debes hacerte esta pregunta tan pronto como te la hagas, porque detrás de la pérdida de una pareja y la dificultad del olvido se esconde una profunda inseguridad que muchas veces conduce a una idealización del otro. Cuando la idealización aparece en tu vida, tienes que lidiar con la situación real: recuerda que esta persona ha cometido muchos errores durante la relación (al igual que tú), piensa en cómo te comportaste con esta persona y cómo se comportó contigo (de verdad) . y reflexionar sobre cómo era exactamente su relación en la última etapa. Te sorprenderías.
Una última razón por la que no puedes olvidar a tu ex podría ser que tu obsesión está relacionada con el aburrimiento. En otras palabras, estás aburrido y debes tener algo en qué pensar. Este es un problema grave porque muchas veces lo que comienza como una forma de divertirse cuando se aburre, especialmente después de meses de duelo, se convierte gradualmente en un hábito. Y ya sabes que los hábitos son muy difíciles de cambiar.
Evita el contacto
Para olvidar a tu ex, es fundamental romper el contacto con él, esencialmente, para romper esos lazos de dependencia emocional que siempre se crean en las relaciones. Si aún lo amas, de nada te servirá verlo bien y feliz cuando te sientes mal; luego bórralo de WhatsApp y redes sociales, al menos por un tiempo para aprender a prescindir de él.
Para poder volver a sentirte bien contigo mismo, nada mejor que empezar a cuidarte, mimarte, renovarte, hacerte un masaje y dedicarte tiempo. Es importante que, ahora, todo el amor que sientes, te lo des a ti mismo.
¿Por qué no puedo superar a mi ex?
Esto puede deberse a varias razones, dependiendo de la relación, pero también de nuestra historia de vida, educación y experiencias previas. Pero estas podrían ser algunas de las razones por las que podría ser más difícil para ti superar a tu ex:
- Nadie nos enseña este proceso, así que lo aprendemos sobre la marcha. saber siempre qué hacer o cómo proceder.
- Las rupturas nos conectan con viejas heridas dolorosas. Las reacciones que podamos tener o la intensidad del dolor pueden derivar de experiencias tempranas de rechazo o abandono.
- A veces la ruptura es repentina y no tenemos las respuestas adecuadas para afrontarla. Puede hacerte pensar obsesivamente sobre lo que sucedió y lo que podría haberse evitado.
- Una ruptura puede hacerte reflexionar sobre lo que hiciste mal y cómo impactaste negativamente en la relación, haciendo que te mires a ti mismo de forma crítica y aumente el dolor.
- El dolor de no estar más con la persona solo puede hacerte ver sus cualidades positivas. Te hace pensar que la relación era perfecta, cuando en realidad no lo era.
- Estar en una relación tiene un valor social, por lo que puede darte una sensación de fracaso o una comparación negativa con las personas en una relación.
- Estar en pareja acostumbra al cerebro a ciertas sustancias químicas relacionadas con el afecto. Por eso, cuando ya no tenemos ese toque o ese cariño, tenemos un sentimiento de “retirada”, por lo que el color puede ser intenso.
Sospechoso 1: Culpable
¿Lo dejaste? estuvo de acuerdo? ¿has comenzado una nueva relación? Te dejó, y después de la ruptura perdiste diez kilos, y ahora estás caliente, y él se arrepintió, pero ahora no quieres volver, y él llora en las esquinas escuchando estas canciones de La Van de Gogh. ¿L’Oreja que siempre ha amado horrorizada?
Lo que las situaciones anteriores tienen en común es que teóricamente te colocan en una posición «superior». La naturaleza te ha dotado de poderosos mecanismos de empatía y culpabilidad para que no te conviertas en un psicópata. Todos nos arrepentimos de lo que hicimos en nuestras relaciones anteriores: arrepentimientos directos por jodidas cosas como «Lo dejé justo después de que lo despidieran de su trabajo» o «Lo engañé con su mejor amigo» hasta arrepentimientos más metafísicos, como «si si se hubiera ido antes, no habría desperdiciado su juventud conmigo y ahora sería feliz.
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