Aparte de las excepciones mencionadas en la primera parte de esta nota ( 4 de setiembre) , el hombre siempre está listo para la sexualidad. Un par de insinuaciones y sus hormonas se desbocan.
Salvo singularidades de atracción sexual irresistible, la mujer funciona de una manera totalmente diferente. En especial cuando la relación ya tiene cierta estabilidad, ella normalmente necesita sentir que todo a su alrededor está bien.
Al menos quiere compartir sus inquietudes y preocupaciones. Sabiendo esto, el hombre puede amorosamente escucharla. Es frecuente que ella prefiera ser sólo comprendida y no recibir un consejo tras otro sobre cómo resolver cada cosa.
La actitud consejera más bien la puede incomodar. Escucharla y comprenderla resulta mágico para ella, aunque para él sea incomprensible el por qué. Este pequeño detalle no se debe pasar por alto. Además, ella quiere ser reconocida como una persona completa y no sólo un objeto de satisfacción sexual.
Este punto es muy importante. Tanto él como ella pueden mejorar su vida sexual y su vida en general al conectar con su esencia, Aumentar su autoestima y promover su Crecimiento personal.
Y hay que tener presente que : un beso especial en la mañana, un toque de trasero irreverente antes de salir, una mirada pícara al medio día y una conversación amorosa en la noche pueden convertir un simple intercambio sexual en una aventura de pasión desenfrenada.
Ahora bien; si ella prefiere el romance en la mañana pero él se desvela si no descarga su furiosa energía sexual en la noche, puede haber un problema incómodo. Solo la comunicación con afán de buscar acuerdos lo puede resolver.
El poder de los aromas
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